Hace algunos días, la plataforma Twitch anunció un despido masivo de más de 500 empleados, lo que representa el 35% de su fuerza laboral. La noticia deja mucho qué pensar respecto del crecimiento acelerado de las Fintech y Startups de tecnología, sobre todo porque desde hace algunos meses, prácticamente todas las empresas de tecnología han sufrido esta clase de despidos, como el caso de Meta, Linkedin, Microsoft, entre muchas otras. 

Para ponerlo en cifras, durante el 2023, se despidió 47% más empleados de tecnología que en el 2022, según cifras de la revista Expansión. Si continúa esta tendencia, es probable que el 2024 también tenga una cifra similar. En este sentido, tal como se dice por ahí… “si el río suena, es porque agua lleva”. Esto quiere decir que algo está pasando en esa industria. Y quizás algo mucho más profundo de lo que podemos tener visibilidad. Pero antes de hablar sobre eventos apocalípticos en temas de tecnología, veamos más contexto de la situación de Twtich. 

Según declaraciones de Dan Clancy, si bien la plataforma “no es rentable”, el proyecto se mantiene gracias a la fuerte inversión de Amazon. Precisamente en una transmisión en vivo, donde respondió dudas acerca de ello —fenómeno curioso pero interesante dada la naturaleza de su plataforma—, Dan mencionó que eran mucho más grandes de lo que necesitaban, de ahí la reducción.

De hecho, hay un fenómeno curioso acerca de la plataforma: la cantidad de dinero que Twitch paga a sus streamers. En este sentido, la cifra asciende a más de $1,000 MDD durante el 2023, siendo una de las plataformas que más invierte directamente en pago para sus creadores. Pero precisamente esta es la trampa en su modelo de negocio. 

En este punto, cabe recordar que Twitch es de las plataformas con mayor número de usuarios en el mundo, sobre todo, la retención en las transmisiones es altísima si la comparamos con otros medios. Tan solo al 2023, contaba con 140 millones de usuarios activos en el mundo y más de 9.2 millones de streamers. Ahora bien, el usuario promedio de Twtich está muy bien definido: en general se cree que es un oasis para las transmisiones de gamers y se ha vuelto imprescindible en esta vertical de negocio; sin embargo, también existen muchos temas de los que poco se hablan, como canales de cocina y/o recetas, por ejemplo. Quizás, en ese sentido, Twitch tiene un nicho muy bien definido, pero hace falta lograr una mayor universidad en cuanto a sus transmisiones para que pueda impulsar aún más su crecimiento, tal como sucede con TikTok, por ejemplo. 

Sin embargo, es interesante que un gigante como Amazon invierta en mantener esta plataforma. Como siempre digo: esto debe ser motivo suficiente para confiar en que hay un plan maestro debajo de ese soporte. Seguramente habrá un crecimiento importante en los siguientes años —¿quizás décadas?— en la industria del streaming y será entonces cuando Twitch se convierta en el líder indiscutible del entretenimiento. Si bien, creo que la tendencia de compartir contenidos en vivo ha tenido un gran crecimiento, pero aún no puede competir con aquellos que son grabados. 

Entonces, con todo esto… ¿Twitch está en peligro? La respuesta rotunda es “no”. ¿La industria tecnológica corre riesgo? La respuesta rotunda también es “no”. Creo que el problema reside en se contrata fuerza laboral para desarrollar cierta tecnología, como el caso del Metaverso y, al final, deciden ya no invertir en ello. Es cuando vienen los despidos. Esto, en conjunto con la situación de la inflación mundial, así como la recesión que se nos viene juegan un papel importante en este punto. 

Tendía que suceder alguna situación en extrema para que Twitch pudiera caer en los próximos años. Pero creo que serían los streamers —junto con su fuente de ingresos— los primeros que tratarían de levantar esta plataforma. 

Pero por el momento, podemos dormir tranquilos.