Existe una percepción generalizada de que la creatividad y la innovación son lo mismo. Cuando en realidad hay una gran diferencia entre estos dos conceptos. Simplemente son procesos complementarios en el proceso de ideación. A continuación exploraremos estos dos conceptos.
Más allá de las ideas brillantes
Para el gran Theodore Levitt la creatividad es pensar cosas nuevas, mientras que la innovación es hacer cosas nuevas. La creatividad está ligada a la habilidad de generar nuevas ideas. La Innovación se utiliza para hacer realidad más allá del papel nuevas propuestas, inventos, modelos de negocio.
De la creatividad a la innovación
Es claro como en la publicidad la creatividad está ligada a las ideas brillantes que producen campañas memorables y por supuesto ventas. Mientras que la innovación está asociada a estrategias de negocio que pueden cambiar y mejorar el entorno del mercado o inclusive crear nuevas industrias o canales de venta.
Un creativo es una persona ligada a las grandes ideas, el innovador es un agente del cambio. De acuerdo al HBR la innovación es la creatividad orientada a resultados. Es crucial hacer una conexión entre las necesidades, deseos, miedos, sueños de los consumidores y cómo las grandes ideas pueden mejorar el nivel de calidad de vida de la gente a través de resultados.
La creatividad se enfoca en destapar el potencial de la mente para concebir ideas originales, por eso muchas veces es difícil de medir. En cambio, la innovación puede abarcar temas tan extensos como son producto, uso, calidad, precio, producción, servicio, nivel de bienestar de vida. Pretende introducir cambios en los sistemas aparentemente estables y está relacionado con la capacidad de hacer que las ideas sean viables. Una vez que se identifica una necesidad latente y no resuelta, a través del proceso de innovación se pueden utilizar recursos creativos para diseñar una solución que aporte un retorno de inversión.
Sin lugar a dudas, la creatividad es el combustible que deben tener todas las empresas y la innovación es el proceso de poner a producir esas ideas. Como alguna vez dijo Levitt, muchas veces lo que falta no es creatividad en la idea sino innovación en el acto de producción, poner las ideas a trabajar.
Necesitamos gente creativa pero también innovadora. Y en el mejor de los casos creativos innovadores.