Como trabajadores solemos tener sueños y metas personales que deseamos llevar a cabo en nuestra vida profesional; como empleadores, debemos velar para que todos puedan lograr esos objetivos en nuestra organización. Muchas veces tenemos en mente que las retribuciones laborales son solo económicas, sin embargo, gran parte de la motivación en el trabajo se relaciona con una recompensa personal y emocional.

Una encuesta realizada por la proveedora de servicios de gestión de riesgo, recursos humanos y consultoría, AON, reveló que “el 82% de las empresas considera que el bienestar de los empleados es importante, pero solo el 24% integra plenamente el bienestar en su estrategia corporativa”. Proyectar en nuestras empresas un área destinada a planificar y abordar el desarrollo y bienestar profesional de los trabajadores, no solo beneficia a nuestros equipos, sino que se ve reflejado en el rendimiento de distintos aspectos empresariales, e incluso llega a proyectar una mejor imagen en los clientes.

Actualmente, los trabajadores, especialmente Millennials o GenZ, prefieren cambiar de trabajo y buscar nuevas actividades que los motiven o permitan crecer profesionalmente, antes que quedarse en un puesto que poco los satisface personalmente. Esto ha llevado a que muchas empresas gasten gran parte de sus recursos en contratación y capacitación de personas, que no terminan siendo permanentes en sus cargos. Además, la inestabilidad en los equipos de trabajo dificulta la realización y seguimiento de actividades, ya que la adaptación de nuevo personal suele ralentizar procesos, cambiar de ideas o hasta perder el momento exacto de ejecución.

La mejor manera de crear un equipo de trabajo estable es brindándole las herramientas necesarias para que puedan crecer laboralmente y lleguen a sentirse realizados siendo parte de nuestra empresa. Inicialmente, para conseguir una buena estrategia de desarrollo profesional se debe conocer a los empleados más allá de sus currículos y entender qué espera lograr en ese cargo, cuáles son sus intereses y motivaciones. De esta manera, los directivos y equipos de recursos humanos serán capaces de desarrollar planes enfocados a que cada uno pueda avanzar en esos objetivos individuales.

Una parte esencial del desarrollo profesional es la capacitación y aprendizaje. Invertir en el conocimiento es invertir en calidad y eficiencia, ya que los trabajadores que están a la vanguardia de sus áreas, serán competentes en la ejecución de nuevas tareas, crear soluciones y enfrentar obstáculos con ideas frescas e innovadoras. Esto, sin duda, es un punto que diferenciará a nuestra empresa de la competencia, pues estaremos más capacitados para resolver las necesidades de los clientes.

A medida que las organizaciones crecen, nuevas vacantes y tareas serán requeridas para estar a la altura a las demandas del mercado, esto es una gran oportunidad en la promoción de ascensos de los trabajadores. Aquellos que ya conocen de tiempo atrás el funcionamiento del negocio, son ideales para estos cargos de liderazgo, porque son capaces de realizar nuevas actividades basadas en su experiencia. Este tipo de reconocimientos motivan a seguir trabajando en el crecimiento de nuestra empresa, y crea una imagen de progreso y oportunidades para los compañeros, quienes verán una oportunidad de carrera y estabilidad.

Las empresas suelen pasar por momentos de lentitud o estancamiento a razón de distintos factores. La salida a estas situaciones puede estar en las capacidades de nuestros empleados y en habilidades como la creatividad, conocimientos en otras áreas e incluso hobbies o aficiones. Esta es una de las partes que se suelen desaprovechar en los proyectos de crecimiento profesional pero que logran ser un comodín en la solución de problemas empresariales y hasta mejorar el ambiente laboral que resulta tan indispensable para un bienestar laboral de todos los colaboradores.

Permitirle desarrollar ese lado más humano dentro de sus actividades laborales, mejoran la formulación de ideas y soluciones creativas. Si nuestros empleados y compañeros avanzan en lo profesional, seguramente el negocio crecerá y será capaz de alcanzar mejores resultados, ser más competitivos y hasta proyectarse metas más ambiciosas.